LEY DE LOS CICLOS – ESPIRALES
Leonardo Díaz. Astrólogo Metafísico
Todo está sujeto a la Ley de los Ciclos. Esta Ley se manifiesta en los planos y dimensiones densas del universo, donde la VIDA UNIVERSAL se manifiesta como tiempo-espacio-movimiento; plano físico, plano etérico, plano astral y plano mental.
En los planos superiores del espíritu donde el tiempo y el espacio no existen esta Ley no
tiene manifestación, para manifestase solo puede hacerlo en el
tiempo-espacio, donde existe el movimiento.
A nivel cósmico se le llama a la Ley de los Ciclos, Ley de la Respiración Cósmica o respiración
del Gran Ser. Esta Ley Universal se encuentra estrechamente relacionada con el movimiento del cosmos, por lo que su estudio es fundamental en Astrología.
Todo movimiento está gobernado por esta Ley, la cual rige el nacimiento, desarrollo, decadencia y muerte de los universos, sistemas solares, planetas, seres vivos y hasta la existencia de la partícula más pequeña. Esta Ley también rige el aspecto social en la vida humana, la historia de las naciones nos demuestra la existencia de ciclos rítmicos o lo que llamamos periodicidad.
Todo movimiento está gobernado por esta Ley, la cual rige el nacimiento, desarrollo, decadencia y muerte de los universos, sistemas solares, planetas, seres vivos y hasta la existencia de la partícula más pequeña. Esta Ley también rige el aspecto social en la vida humana, la historia de las naciones nos demuestra la existencia de ciclos rítmicos o lo que llamamos periodicidad.
Cuando algo muere, algo nuevo nace. El alfa y la omega se suceden uno
al otro. Todo tiene su tiempo bajo el Sol, así lo declara la Biblia y muchos otros textos sagrados.
Esta Ley se cumple en la historia de cada ser humano ya que nuestro destino
también está regido por ella. Cada etapa, período y capitulo de nuestra vida
obedece a los ciclos que se inician, desarrollan, decaen y necesariamente
llegan a su fin para dar inicio a otros, a lo nuevo.
La Ley de los Ciclos, al igual que todas las leyes que rigen el
movimiento de la vida, obedece a la inteligencia universal, a la inteligencia
del espíritu dentro del cual vivimos, nos movemos y tenemos nuestro Ser. Esta
Ley no es ni buena ni mala, es simplemente una Ley Universal. Así funciona el
universo, mediante leyes infalibles, que son las Leyes de Dios.
Cuando en astrología metafísica estudiamos conjuntamente la Ley de los Ciclos y la
Ley de Evolución Universal nos damos cuenta que la armonía reinante en todo el
universo. A simple vista, la Ley de los Ciclos pareciera que representa un
recorrido circular sin sentido, pero no es así, el movimiento cíclico NO es
exactamente circular, la astrología metafísica enseña que la evolución tiene lugar a
través del movimiento cíclico–espiral.
Aun que todo está sometido a la ley de los Ciclos, estos ciclos nunca son iguales, cada ciclo se desarrolla en un nivel superior de la espiral cósmica. Este movimiento circular aparente siempre produce un salto en su recorrido ascendente. Por el conocimiento del desarrollo cíclico-espiral es que metafísicamente podemos afirmar que todo evoluciona. La astrología metafísica afirma que todo evoluciona mediante ciclos de crecimiento, ciclos evolutivos/espirales.
Aun que todo está sometido a la ley de los Ciclos, estos ciclos nunca son iguales, cada ciclo se desarrolla en un nivel superior de la espiral cósmica. Este movimiento circular aparente siempre produce un salto en su recorrido ascendente. Por el conocimiento del desarrollo cíclico-espiral es que metafísicamente podemos afirmar que todo evoluciona. La astrología metafísica afirma que todo evoluciona mediante ciclos de crecimiento, ciclos evolutivos/espirales.
Mediante el estudio de esta Ley, la astrología metafísica enseña a reconocer
los ciclos en nuestra vida y aprender a fluir con ellos, respetándolos ya que no podemos violar la Ley, solo podemos
adaptarnos mediante acciones armoniosas. Somos parte de esta corriente universal
que se renueva en ciclos y así debemos aceptarlo.
Debemos reconocer cuando ha llegado el momento de cerrar un capítulo en
nuestra vida e iniciar otro. La vida transcurre ininterrumpidamente y aprender
a vivir implica saber cuándo ha llegado el momento en que termina una etapa y
se inicia otra.
La Ley de los Ciclos nos lleva de su mano y aunque nos produzca un poco
de miedo cerrar un ciclo que se ha cumplido, dar vuelta a esa hoja y comenzar
de nuevo otra etapa, debemos comportarnos con sabiduría y, sin resistencia, entregarnos al
nuevo ciclo que se inicia. Nada es para siempre, todo tiene su fin, pero ese
fin implica que nos encontramos también en el comienzo de algo nuevo.
Si aceptamos este nuevo ciclo y nos entregamos confiados a vivir esta nueva etapa sin aferrarnos al pasado, habremos descubierto la clave de la felicidad ya que cada etapa, cada nuevo ciclo está lleno de experiencias nuevas por la que podemos transitar confiados en la vida.
Si aceptamos este nuevo ciclo y nos entregamos confiados a vivir esta nueva etapa sin aferrarnos al pasado, habremos descubierto la clave de la felicidad ya que cada etapa, cada nuevo ciclo está lleno de experiencias nuevas por la que podemos transitar confiados en la vida.
El consejo, guía y orientación que recibimos de un astrólogo, cumple el propósito de ayudarnos a fluir de forma inteligente y armoniosa con los ritmos cósmicos que nos influyen día a día. Fluyendo sin resistencia, evitamos el dolor.
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